¿En qué consiste el trabajo que se desarrolla en el proceso de Arteterapia?

El arteterapeuta acoge a la persona de modo que esta se sienta aceptada, reconocida y en confianza suficiente para disponerse a la apertura de un encuentro creador. Propone condiciones de espacio, tiempo y materiales en una escucha profunda de sus necesidades; brindando a las vivencias que acontecen el sostén necesario para el desarrollo de un proceso que será tanto expresivo como introspectivo; alentándola al encuentro del sentimiento de sentirse vital y creadora en su propia existencia. Para ello irá invitándola a realizar producciones que tal vez tomarán formas plásticas y visuales, sonoras, corporales dramáticas, de escritura, etc. y que se desarrollarán tanto con materiales reconocibles a este fin como con otros objetos cotidianos a los que, mediante un uso desacostumbrado, se restaura su capacidad poética y su potencialidad simbólica. Para atender este proceso en su vertiente psicológica tendrá en cuenta los modos de interacción, relación y vínculo que son fundamentos de todo acto de comunicación humana.

El arteterapeuta atiende a la persona siendo respetuosa con sus condiciones de salud, edad, identidad, condición social y económica, origen, cultura, etc., alentándola en su potencialidad de ser. No importa el punto de partida o las dificultades que se sufran, ya sean propiamente emocionales, de salud, de conducta, de aprendizaje; situaciones de violencia, de anomia, de desestructuración familiar, de inmigración y de posible marginación social; de problemas con su identidad; de dependencia a tóxicos, a las pantallas; no importa que se esté en un moemnto inicial o terminal de la existencia. Siempre, en toda circunstancia y con la adecuada escucha, vamos a encontrar a la persona que espera poder vivir digna y creadoramente en su existencia.